EL ORO FUE EL PREMIO A TANTO TRABAJO

"Las guerreras", en el corazón del público. "Las guerreras", en el corazón del público. Prensa COA / ENARD

Ana María Gallay y Georgina Klug partido a partido se fueron metiendo en el corazón del público gracias a esa garra inquebrantable que supieron transmitir en cada punto ganado. A ese temperamento avasallador, a la simpatía y al esfuerzo contante, al pelearlas todas y no bajar nunca los brazos. "Las guerreras" son las campeonas panamericanas de beach vóley y las elegidas por la gente.

 

Gallay comentó que “es un orgullo dejar al beach vóley nacional en lo más alto de América. Espero que sea el comienzo del desarrollo en el deporte y que muchas duplas más puedan seguir nuestros pasos”.

 

Por su parte, Klug enfatizó que “lo vivimos con una alegría increíble, muchísima emoción.  Veníamos totalmente emocionadas del partido contra Brasil y el objetivo estaba más que cumplido así que salimos a la cancha pensando en dejar todo lo que somos”.

 

 “El oro fue nada menos que la cereza del postre, el premio tan soñado a tanto trabajo y esfuerzo que venimos haciendo” añadió Georgina y sobre la aceptación de la gente recalcó: “queremos mostrar lo apasionante que es nuestro deporte, como lo vivimos y como nos divertimos dentro de la cancha”.

 

Para Ana María Gallay “nuestro objetivo más ambicioso era estar entre las cuatro. Cuando le ganamos a Brasil dijimos: Ya está! Si se da una medalla es genial. Pudimos jugar sueltas la final y estuvo muy buena deportiva y emocionalmente, en todo aspecto”.

 

Goergina Klug, además, explicó que “sabíamos que los cuatro equipos de arriba eran parejos y tuvimos que luchar contra todos. Contra Cuba en la zona, con Estados Unidos en los cuartos, las sufrimos a todas. Lo lindo fue que una vez que comenzó el torneo dejamos de pensar en el objetivo y jugamos dejando lo máximo que teníamos y el resultado llegó solo”.

 

La representante olímpica dijo que “en la final estuvimos más relajadas, ya habíamos asegurado medalla así que estábamos jugando por el honor”.

 

“El partido fue deportivamente bueno, nosotras neutralizamos bien el saque de ellas, que es su mayor arma. Planteamos jugar en el medio y nos salió en casi todas las pelotas, Geo defendió un montón y yo pude bloquear: estuvo bien la estrategia de juego que planteamos con Pablo Del Coto y el monito (Mariano Baracetti)” así que el triunfo es de los cuatro” analizó Gallay.

 

Asimismo, Klug contó que”cuando arrancó el segundo set se vino un vendaval y decidimos adelantarnos porque nos venir lo que se venía. Resignamos casi unos tres metros porque sabíamos que la pelota iba a bajar en rosca en contra del viento, lo que es muy complicado, y dijimos ¡aguantemos! Tratemos de robarles la mayor cantidad de punto. Arrancamos abajo y así y todo sabíamos que en algún momento se nos iba a dar”.

 

“Con el saque nuestro fuimos remontando puntito a puntito y nos pusimos 20 a 19 al final, nos abrazamos en la última pelota y dijimos lo cerramos acá. Ana hizo lo que tenía que hacer, buscar fuerte el bloqueo arriba sin miedo y se fue el segundo. En el tercero pensamos: que salga lo que salga porque en el beach vóley el tea breck es para cualquiera porque pasa muy rápido y depende de la suerte, del lado, del viento, son pequeñas cositas que definen y quizás hoy no sería la de oro. Lo que queremos destacar es la entrega dentro de la cancha” explicó Georgina.

 

Respecto al apoyo del resto de la delegación argentina, Ana María dijo que “la tribuna estaba llena, había un montón de argentinos (chicos de otros deportes), eso esta bueno, no es normal que vayan tantos deportistas a ver otro deporte”.

 

El fervor del público se hizo sentir y al respecto la dupla femenina  sostuvo que “ese fue otro plus, saber que detrás de las cámaras estaba toda la gente siguiéndonos. Nuestro entrenador, que se quedó en Mar del Plata, nos dijo que lo lindo este torneo es que no sufrís solo. Hasta el verdulero opina de cómo juegan ustedes y me da consejos”.

 

“Que nuestros seres queridos se sientan acompañados y valorados es muy bueno. Es un mimo para todos. El cariño de la gente siempre suma. Nos ha llegado el cariño de toda Argentina” destacó Klug.

 

A la hora de los agradecimiento Gallay destacó a “Pablo Del Coto que es el que nos entrena en Mar del Plata, al monito Baracetti, a todo el cuerpo técnico, a la Federación Argentina de Voley, al Comité Olímpico Argentino, a la Secretaría de Deporte y al ENARD, gracias a ellos podemos competir a nivel internacional y por todo ese combo hoy trajimos la medalla de oro”.

 

“Parecen frases hechas pero para un deporte como el beach vóley que es tan caro salir a competir afuera y tan importante para nosotras competir en el circuito mundial realmente estamos más que agradecidas porque si no hubiese existido el ENARD no hubiésemos arrancado. No sabíamos cómo nos iba a ir y fue un empujón muy grande” amplió Klug.

 

Pensando en el desafío, Río 2016, la  santafesina recalcó que “queremos jugar todas las competencias de acá a los Juegos Olímpicos. Lo necesitamos en puntos y en calidad de competencia. Se está realizando un trabajo serio en el beach vóley y se nota. Nos vamos profesionalizando pensando ya en los Juegos”.