En su debut dentro del ciclo olímpico, el rugby venía con la chapa de candidato. Sobre todo los varones, ya que en el femenino Brasil es la potencia continental. Y no defraudaron. Ni los varones, que se llevaron la medalla de oro mostrando una clarísima superioridad sobre el resto, ni las mujeres, que pese a caer en el choque decisivo ante las “verdeamarelhas” dejaron en claro que están en pleno crecimiento.