Brasil, que buscará defender el título conseguido hace cuatro años, en Lima 2019, cuando vencieron en la final a Estados Unidos, que no participa en Santiago 2023, contaron con la figura de la cancha, Leila Zabani, lideró la ofensiva con 19 puntos, 15 de ellos en triples, ante unas argentinas combativas, pero claramente superadas.
Argentina, que hasta estos Juegos nunca había subido a podio Panamericano, tuvo en Victoria Gauna (14 puntos, 3/5 en triples) y Camila Suárez (12 y 3 asistencias) y Agustina Jourdheuil, con 10 tantos, a sus jugadoras más destacadas.
La clave de Brasil radicó en su elevado número de aciertos desde 6,75 con un total de 15 triples, superando su promedio en el transcurso del torneo que era de 10 por partido. Esta eficiencia en los tiros de larga distancia les proporcionó una ventaja significativa y fue un factor crucial en su victoria representando casi el 60% de los puntos generados por el equipo. A esto se sumó la notable diferencia en la cantidad de rebotes capturados, con Brasil bajando 52 recobres en contraste con los 33 del cuadro albiceleste.
Argentina salió con Camila Suarez 12, Agustina Marin 2, Agustina Jourdheuil 10, Candela Gentinettta 2 y Victoria Gauna 14 (f.i.); Valeria Fernández 4, Agustina García 0, Carla Miculka 3, Malvina D´Agostino 0, Delfina Saravia 2, Magalí Vilches 0 y Natassja Kolff 8.