Cada departamento tiene entre uno y cuatro dormitorios, con baños y salas de estar. Dentro de cada edificio, los atletas contarán con servicios de limpieza, lavandería, centros para residentes y espacios multirreligiosos.

El comedor también es imponente. Tiene una capacidad de 3.200 comensales y estará abierto durante las 24 horas durante los Juegos. Los responsables del lugar dicen que “será el restaurante más grande del mundo por dos meses” y que “sus comidas buscarán representar a las 206 naciones participantes”. El menú, de por sí variadísimo, rotará cada ocho días. En la cocina estarán los más reconocidos chefs de París, quienes se encargarán de producir más de 500 recetas diferentes.

También estará abierto durante las 24 horas el gimnasio de musculación del Centro de Fitness, que cuenta con un total de 350 equipos de última generación y ocupa una superficie superior a los 3.000 metros cuadrados.

Habrá un policlínico de 3.500 metros cuadrados. Además de una farmacia, una sala de extracción de sangre, un servicio de urgencias y zonas de fisioterapia, podología, dermatología, ginecología, cardiología y oftalmología. Por último, se instaló una zona de recuperación, con 18 baños fríos.

Otros servicios que se ofrecerán es el de un pequeño supermercado, el de doce lavanderías con 600 lavadoras que proporcionarán cerca de 60.000 lavados durante los Juegos y el de un salón de belleza que ofrece servicios de peluquería, manicura y barbería.

La hidratación es uno de los temas en los que ponen énfasis los organizadores. Con ese fin se instalaron nada menos que 200 fuentes de bebidas en la Villa para contribuir al objetivo de reducir a la mitad el uso de plástico de un solo uso previo al reciclaje; el restaurante de la Villa Olímpica también estará libre de botellas de plástico.

El dato inédito es que se ha instalado una guardería, a la que se llamará Espacio Familiar. Se trata de un espacio cómodo y práctico para que los atletas que son padres puedan reunirse con sus hijos. Está equipado con un cambiador, una zona de lactancia, un área de juegos y otra para pasar tiempo en familia.

Como ocurre en casi todos los Juegos del ciclo olímpico, la Villa será el legado que la ciudad le dejará a la comunidad. Una vez que en París 2024 hayan culminado las competencias deportivas, el predio de 54 kilómetros cuadrados se convertirá en un barrio con 2.500 nuevos hogares, una residencia para 800 estudiantes, un hotel, un parque con jardines de tres hectáreas, 120.000 metros cuadrados de oficinas y 3.200 de comercios.