El triunfo ante México por 27-16 en las semifinales de los Juegos Panamericanos Toronto 2015 adquirió instantáneamente el status de 'histórico'. No solo porque Argentina se aseguraba un lugar en el podio de este evento por cuarta vez consecutiva, sino también porque sacaba pasaje para sus primeros Juegos Olímpicos en la historia del balonmano femenino.
"La preparación ya empezó. Si bien tenemos el Mundial, el nivel de los rivales es parecido, entonces la preparación apunta un poco a todo. El Mundial va a ser una puesta a punto y una manera de ir acercándonos a la competencia con las potencias con las que nos vamos a encontrar en los Juegos. Como siempre dándole mucho lugar a la parte física. Tratando de jugar con hombres para incrementar el roce, la intensidad y la dinámica del juego. Con la expectativa de ver en el Mundial si tenemos la posibilidad de que algunas jugadoras se queden jugando en Ligas europeas para que nos nutra en lo individual y nos alinee de a poquito con las potencias europeas", sostuvo el entrenador de La Garra.
Los mejores 12 seleccionados del mundo dirán presente en la máxima contienda deportiva y, más allá de lo difícil que resultará enfrentarlos, Peruchena resalta: "No quedarse en el exitismo de especular con resultados sino de poder crecer, aprender, nivelarnos con las potencias europeas y codearnos".
"Tenemos que tener los pies en la tierra. A partir de ésto, ponernos metas: crecer, experimentar, poder jugar la mayor cantidad de minutos de igual a igual, como nos pasó en la final con Brasil en Toronto. Metas que nos vayan acercando para, en un futuro no lejano, pensar en codearnos de igual a igual con los europeos", agregó.
También destacó que los Juegos se realicen en Sudamérica, dado que habrá "más gente nuestra alentándonos, observándonos. Yo creo que van a ir muchos argentinos a Río. Hemos despertado un poquito la idea de que La Garra puede dar batalla".