"De lo mejor que me tocó vivir. No faltaba nada, la comida fue espectacular. El clima ayudó mucho también, la verdad que ese promedio entre 20, 25 grados era ideal", agregó.
Los Gladiadores se mantienen firmes entre los mejores, en una etapa de desarrollo que transita no solo el handball en Argentina sino también el de todo el continente. "Creo que viene creciendo. La verdad que los últimos años no solamente nosotros y Brasil, a nivel mundial venimos un escalón más adelante de lo que venía siendo históricamente, sino también Chile, Uruguay...Los países norteamericanos están mejor. Se ha vuelta mucho más competitivo", explicó Fernández.
Aunque la medalla de oro se escapó por poco, el jugador de Universidad de Luján se quedó conforme por lo demostrado por Argentina. "El objetivo principal era ganar el oro. En lo personal bien, no me puedo quejar. Obviamente siempre se puede jugar mejor. Pero creo que hice un buen torneo. En cuanto al equipo, esas finales con Brasil a veces le toca a uno, a veces a otro. Nos tocó ir al alargue y perder. Cosas para mejorar hay siempre y creo que hay que apuntar a eso para llegar bien a los Juegos", cerró.