En enero de este año, ante la Organización Deportiva Panamericana (ODEPA) “presentamos una carta de intención con el objeto de hacer un análisis. Fundamentalmente, este estudio estaba pensado en el legado que podía dejarnos Buenos Aires 2018 en referencia a un proyecto futuro, para poder llegar a nuestro gran sueño”.

“Hicimos el dossier completo con el análisis de todas las sedes y del presupuesto. Fue un trabajo muy arduo para entender cuánto nos costaba y qué podíamos utilizar”.  En  base a éste minucioso análisis Werthein señaló: “Hemos decidido postergar la sede de Buenos Aires para los Juegos Panamericanos 2023. ¿Por qué? Porque cuando vimos las sinergias dentro de las prioridades que existían en la ciudad, era que la Villa Olímpica de 2018 se entregara inmediatamente después de los Juegos a viviendas sociales como prioridad para re-urbanizar la zona sur de la ciudad. Claramente, tendríamos que hacer una Villa Panamericana bastante más grande”.

“El segundo punto es que este era un proyecto exclusivamente de la ciudad de Buenos Aires, donde íbamos a llevar adelante los Juegos Panamericanos sin sub-sedes. Además de una Villa nueva y de aggiornar los escenarios deportivos hay ciertos requerimientos que están dentro del mundo Panamericano que son diferentes al de los Juegos Olímpicos de la Juventud”.

Luego añadió, “Al realizar las proyecciones, el presupuesto se acercaba a 700 millones de dólares. Nos pareció que en esta instancia, el impacto presupuestario de los Juegos y la viabilidad era un tema demasiado fuerte, teniendo en cuenta que tenemos los Juegos Olímpicos de la Juventud el año próximo. El tema se consensuó entre el gobierno nacional, el gobierno de la ciudad y el COA, y pensamos que lo mejor es tomarnos cuatro años más”.

“Al tomarnos cuatro años más, nos damos un poco más de tiempo y priorizamos otros temas que tienen que ver con lo social y cosas que están pendientes” sostuvo el presidente del COA.

Ante la declinación de Buenos Aires para el 2023, Santiago de Chile queda como única candidata a albergar la cita continental, y  Werthein dijo que respaldará dicha moción: “es una ciudad que ya se candidateó varias veces y nos parece que está bien apoyar su candidatura y así nosotros nos preparamos con más tiempo y con más tranquilidad para el 2027”.

“Nosotros, como Comité Olímpico, seguimos con la firme intención de que Buenos Aires sea la capital del deporte de América. Tenemos un sinnúmero de propuestas como el Mundial de rugby en 2027,  donde quizás también haya una sinergia importante para poder aprovechar los dos eventos. En el medio, seguramente, vamos a pelear el Mundial de básquet y creemos que nos dará la posibilidad de que el país vaya despegando y que los indicadores económicos mejoren, por ello nos sentimos más cómodos de llevar esta postulación un período después” afirmó Werthein.

Sobre la posibilidad de que el Comité Olímpico Internacional (COI) decida asignar las sedes de los Juegos Olímpicos de 2024 y 2028 durante la misma Sesión, quien también es miembro COI, opinó “sería muy bueno que se asignen 2024 y 2028 juntas porque tenemos dos sedes de unas características únicas (Los Ángeles y París). Debemos seguir evolucionando en la manera en la que se candidatean las ciudades y la forma de cómo se organizan los Juegos”.

En referencia al mundo Panamericano, Werthein precisó que “vamos a tener que alinearnos con una nueva modalidad de cómo llevar adelante los Juegos, cómo hacerlos más accesibles para encontrar un camino que aliviane el costo para que puedan seguir rotando por las distintas ciudades de América.”

 “Creemos que Buenos Aires es una ciudad ganadora y tiene mucho consenso en América” concluyó Werthein.