Las estructuras de las camas fabricadas con un cartón altamente resistente son capaces de soportar hasta 200 kilos de peso. Las camas son impermeables y resistentes al fuego
Además, los colchones diseñados por la compañía Airweave (patrocinador del evento) estarán hechos 100% de poliéster y estarán compuestos por tres secciones con diferentes tipos de durezas, con el fin de que cada atleta las adapte a sus necesidades para mejorar la calidad del sueño.
Una vez finalizadas las competencias, las camas servirán para hacer papel mientras que los componentes de los colchones se utilizarán para hacer nuevos productos de plástico.
Asimismo, la plaza de la Villa Olímpica se construirá con maderas procedentes de 62 municipios de Japón a los que, una vez terminada la contienda deportiva, se devolverán para reutilizarlas.
Otro de los proyectos ambiciosos de este operativo ecológico es la fabricación de las medallas olímpicas con metales reciclados procedentes de teléfonos móviles y aparatos electrónicos.