Su compromiso fue crucial para que el Comité Organizador de Tokio estuviera mejor preparado que nunca. A lo largo de estos años, el Primer Ministro Abe fue un socio fuerte que siempre defendió los intereses de Japón y que, al mismo tiempo, siempre se podía confiar en él. De esta manera, pudimos encontrar soluciones, incluso en las circunstancias más difíciles de la pandemia del COVID-19, que permitieron que su visión para Japón se hiciera realidad, aunque con un año de retraso.
Todos los atletas japoneses y los atletas del mundo entero le están muy agradecidos”.
El Primer Ministro había apoyado fuertemente la candidatura de Tokio para ser sede de los Juegos Olímpicos de 2020, que finalmente ganó en la 125° Sesión del COI, llevada a cabo en Buenos Aires.
Debido a la crisis sanitaria mundial, Abe y Bach acordaron posponer el evento hasta el 2021.
Abe, de 65 años, renunció a su cargo debido a problemas de salud, una colitis ulcerosa crónica que ya lo había afectado en 2007 y que lo había obligado a abandonar su cargo.
Llevaba 2.799 días de forma ininterrumpida al frente del gobierno y recientemente había batido el record absoluto de longevidad como Primer Ministro de Japón.