Argentina enfrentará mañana a Paraguay, desde las 20.40 horas, en la definición por la medalla dorada. 

Gran primer tiempo de la arquera Valentina Menucci bajo los tres palos, muy bien acompañada en el juego por Martina Lang y Berenice Frelier, la efectividad de Carolina Bono y la conducción de Sofía Manzano. 

La Garrita se mostró mucho mejor desde el aspecto anímico y con el correr de los minutos logró tomar una buena distancia en el marcador, que llegó a ser de 11-5, lo cual obligó al entrenador brasileño a pedir minuto para reordenar las cosas. 

En los minutos finales, las brasileñas imprimieron una defensa mucho más profunda y lograron achicar la diferencia en el tanteador, pero las dirigidas por Martín Duhau lograron irse al descanso por 12-10. 

En la segunda parte, Argentina no pudo sostener el ritmo de juego rápido, vertiginoso y punzante de la primera media hora, pero dio una verdadera muestra de carácter, entrega, compromiso  y corazón. 

Ante la falta de fluidez y constancia en el manejo de la pelota en algunos pasajes, las dirigidas por Duhau se hicieron fuertes en la defensa, con Sol Azcune como baluarte, y la muralla de Menucci en el arco. En ataque, las fintas y penetraciones fueron claves para doblegar a la defensa rival. 

Argentina volvió a sacar ventaja en el marcador, esta vez de cuatro goles, pero algunas malas decisiones en ataque albiceleste y algunas desatenciones defensivas permitieron a las brasileñas meterse en partido. 

Sin embargo, La Garrita tuvo la paciencia necesaria y la cabeza fría para afrontar los  minutos finales y ponerle el moño a una enorme victoria 23-21, que las depositó en la final panamericana.