EL VOLEY MASCULINO CONSIGUIÓ SU TERCER ORO PANAMERICANO

EL VOLEY MASCULINO CONSIGUIÓ SU TERCER ORO PANAMERICANO Prensa COA

La selección masculina de voley festejó a lo grande tras ganar la medalla de oro al superar a Cuba por 3-0 (25-20, 25-17 y 25-20) en la final de los Juegos Panamericanos Lima 2019. El equipo logró repetir el primer puesto del podio de Toronto 2015 y, sumada a la de Mar del Plata 1995,  se subió a lo más alto por tercera vez a este nivel.

 

 

Un equipo joven que da esperanza de recambio a futuro, demostró un gran nivel y mucha solidez, como a lo largo de un torneo en el que sólo perdió un parcial. Argentina arrancó fuerte en el primer set (se puso 4-1) y apretó en cada cierre, lo que le permitió llevarse el partido. La selección llegó a cada segundo descanso técnico, a los 16 puntos, en ventaja (16-12, 16-12 y 16-14), que siempre estiró después.

 

El tercer parcial fue el más complicado, ya que el inicio de Cuba fue bueno y Argentina llegó a estar cuatro puntos abajo en el 2-6, una desventaja que supo remontar. Terminado el partido, Nicolás Bruno fue distinguido como el mejor jugador del torneo y Matías Sánchez, como el mejor armador.

 

 

Jan Martínez, quien anotó 12 puntos en la definición, reflejó sus sensaciones: “Esta medalla me genera alegría al poder compartir esto con este grupo, que tiene 11 jugadores terribles y 11 personas increíbles. Estoy muy contento al saber que hicimos un gran torneo, que vinimos a buscar la medalla de oro y la conseguimos. Todo eso me llena”.

 

 

Además, agregó: “Se aprende constantemente. En cada partido, cada torneo y cada instancia. Es increíble poder ganarlo y aprender a tener una mentalidad ganadora. Siempre trato de refrendar día a día lo que hago y conseguir en cada torneo lo que me propongo”.

 

 

Sánchez, quien repite del plantel que ganó el primer título mundial Sub 23 en 2017 como Martínez, señaló: “La medalla representa mucho. Lo que logramos es grandísimo para el deporte argentino y para el voley. Es gigante lo que se siente con estos títulos. La adrenalina y el cosquilleo en la panza son lo que dan ganas de seguir y de no aflojar”.