El show tomó como disparadores el esfuerzo, la perseverancia y el trabajo como puntos claves en busca de la evolución y la transformación, para superar las adversidades y alcanzar los sueños y objetivos, tanto de los deportistas como de los espectadores, y los invitó a hacer realidad los sueños.
El espectáculo comenzó con el "Despertar de la Tierra", en el que artistas con vestimenta autóctona de tribus indígenas recibieron al son de los tambores a un águila, figura sagrada que tiene la capacidad de predecir el futuro y que sobrevoló el estadio.
El DJ Shub plasmó la multiculturalidad de la ciudad de Toronto a través de los ritmos de hip hop y dance hall interpretados por 183 bailarines latinoamericanos.
Argentina encabezó el tradicional desfile de las 41 delegaciones que participarán en los juegos, cada una acompañada por su ritmo típico. Walter Pérez, el abanderado nacional expresó eufórico: “La verdad que es un orgullo. La disfruté muchísimo. Ir adelante de la delegación y entrar al estadio es imponente. Gocé y disfruté de la ceremonia”.
Tras el juramento panamericano de los atletas, jueces y oficiales llegó el momento de los discursos de Saad Rafi, director ejecutivo del Comité Organizador; de la ex atleta Alexandra Orlando y del presidente de la Organización Deportiva Panamericana (ODEPA) Julio Maglione. La declaratoria de inauguración estuvo a cargo de David Johnston, gobernador general de Canadá.
A meses de la muerte de Mario Vázquez Raña se le realizó un afectuoso homenaje a quien fuera presidente de la entidad rectora del deporte panamericano por 40 años.
Para finalizar, aparecieron en escena los cinco guardianes, símbolo del pentatlón, que fueron el deleite de los presentes con sus imponentes juego de luces y coreografías atrayentes.
Se proyectó un video en el que el campeón olímpico Donovan Bailey se lanzó en paracaídas desde la CN Tower, con la antorcha entre sus manos y, luego, descendió sobre el escenario para entregarsela a la clavadista de 15 años Faith Zacharias. Tras recorrer de mano en mano por diversas figuras del deporte canadiense, la antorcha recaló en poder del ex-basquetbolista de la NBA Steve Nash quien encendió el pebetero. Ese fue el momento culminante de la noche.
El fuego panamericano alumbrará hasta el próximo 26 de julio fecha en la que se clausuran los Juegos.