"Es la competencia máxima para un deportista. Es lo que cualquier deportista quiere vivir. Más allá del torneo en sí, que es deportivamente espectacular, el vivir en la Villa Olímpica, el estar con la gente, que se viva en todo el mundo, las expectativas que crea... Es inigualable" aseguró Juan Pablo Fernández.
Río 2016 será especial para el handball argentino, ya que por primera vez tiene clasificadas a las selecciones femenina y masculina. En el caso de Los Gladiadores, será su segunda experiencia olímpica.
¿La clave para conseguir el objetivo? "Hay que estar al 100%, prepararse de la mejor manera, no dejar ningún margen de error. También necesitás un poquito de suerte" sostuvo Fernández.
Para el jugador de Universidad de Luján, integrar la Selección Argentina es "una sensación inigualable. Cuando vos representás a tu país, a tu gente, a tu familia, a tus amigos. Creo que no hay margen de error y se deja todo. Para los deportistas es un privilegio poder representar al país".
La cercanía con Brasil, un ambiente conocido para los deportistas argentinos, favorecerá seguramente a la delegación nacional. Sobre este tema también se expresó Juan Pablo Fernández. Y dijo: "Más allá de que Brasil es el gran local, para todos los países sudamericanos es un poco como jugar en casa. Vamos a tener mucha gente que nos va a seguir allá".